El hábito o moda de perforarse el cuerpo para colocar joyería no es nuevo, sin embargo los lugares sí lo son, al menos en nuestra cultura occidental que en los últimos años ha reflotado la costumbre de perforar la piel.
Los lugares habituales para perforar y colocar joyería, o sea piercings, suelen ser:
- piercing en los labios
- piercing en las cejas
- piercing en la lengua
- piercing en la nariz
- piercing en las orejas
- piercing en el pezón
- piercing en el ombligo
- piercing en las mejillas
Actualmente se comenzaron a perforar zonas planas como:
- piercing en el cuello
- piercing en el pecho
- piercing en las muñecas
- piercing en la sien
- piercing en los dedos
Algunos sin orificio de salida. Estas perforaciones dependen de técnicas nuevas como el microdermal y el surfacing, merecen cuidados especiales, mucha higiene y hay que saber hacerlo, al igual que otras perforaciones especiales, como las genitales, de pezón y de lengua.
Cada perforación merece atención, sobre todo las nombradas y es importante que sigas los consejos sanitarios y de higiene que te hace el perforador, no lo desoigas o acabarás perdiendo el aro tras una seria infección.
Cuídate y concurre al local de un excelente piercer para realizar estas perforaciones especiales, cuida tu salud y tu belleza.